sábado, 23 de octubre de 2010

Pequeña reflexión sobre la homofobia

Esta tarde estaba sentada en un banco de la plaza del ayuntamiento con mi mejor amiga y su novio, cuanod me ha llamado la atención algo que había en el banco de enfrente. Se trataba de dos chicos de mi edad más o menos, que estaban muy juntitos comiendo pipas y dándose besos. Les hemos mirado los tres, desde el otro lado de la plaza, con una sonrisa de ternura dibujada en nuestros labios. Es bonito ver que existe amor (aunque actualmente, y por motivos personales, yo no crea en él), y más bonito aún es ver a dos chicos que disfrutan de su amor ajenos a lo que pueda pensar la gente de ellos.

Pues bien, en la plaza había unos niños jugando tranquilamente al fútbol. De repente, un niño se ha acercado al banco donde estaba la parejita, y ha dicho, literalmente, "¡qué asco, dos chicos besándose! ¡venid a verlo!". Y efectivamente, acto seguido los pobres chicos se han visto rodeados por cuatro críos que no pasaban de los 8 años y que estaban riéndose de ellos. Han intentado ignorarles y han seguido a lo suyo, demostrándose su amor y sin hacer daño a nadie, sin meterse con nadie. Pero las risas de los niños han acabado por cansarles, y han decidido irse. Se han levantado del banco y han echado a andar agarrados de la mano. Como "despedida", las risas de los niños y gritos de los mismos "angelitos". Cosas como "dos chicos de la mano, ¡son novios!" o "qué asco, qué asco" han salido de los labios de los infantes.

No tengo palabras suficientes para expresar la pena que he sentido al ver eso. Los pobres chicos alejándose cogidos de la mano, cohibidos, con unos mocosos riéndose de ellos. ¿Y luegon dicen de la gente mayor? Señores, las nuevas generaciones hacen lo que ven, son lo que ven, y de nosotros depende lo que hagan en el futuro. Somos su ejemplo a seguir. Me pregunto qué oirán esos niños en sus casas para decir algo así ante una imagen que, si bien poco habitual, no por ello deja de ser una muestra de amor entre dos personas. La educación empieza en casa, y si no enseñamos a nuestros hijos a ser tolerantes (con los homosexuales, los extranjeros, los disminuidos,...en resumen, con cualquiera que sea "diferente a la mayoría"), el día de mañana transmitirán a sus hijos los mismos "valores", y así iremos avanzando hacia una sociedad cada vez más retrógada, retrasadaa y, sí, facha.

Decidme, ¿qué mal hacen dos personas que se quieren? ¿A quién hacen daño? ¿Qué más da si son un chico y una chica, dos chicos o dos chicas? ¿Qué importa, con tal de que ellos-o ellas-sean felices? Cada vez estoy más cansada de la hipocresía de la gente, de la "educación" que se recibe tanto en casa como en el colegio, de la falta cada vez más preocupante de valores morales. ¿Y éste es el futuro del país? Señores, estamos (y perdón por la palabra) jodidos. En nuestras manos está reconducir esto hacia una sociedad más tolerante.

Quizá esto me "toca" más adentro porque sé lo que se siente en el lugar de esos dos chicos. Hace unos años, yo era de la que se reían los niños por ir de la mano con una chica, por besarme con ella. El amor es algo muy bonito y muy difícil de encontrar (al menos el amor verdadero), así que si estáis enamorados vividlo al máximo, sin importar quién sea vuestra pareja y, sobre todo, sin importar lo que digan los demás. Que le jodan al resto del mundo, mientras tú estés feliz y tengas a tu lado a una persona que te quiera. Pero nunca, NUNCA te escondas ni te avergüences de lo que eres.

A reflexionar todos :)

3 comentarios:

  1. me ha gustado =)y sabes d sobra k sty d acuerdo al 100%.Cuando veo casos cm el d hoy,siento verguenza d mi propia gnt

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  2. me ha gustado mucho el post, sigue asi!!

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  3. Pequeña gran reflexión... enhorabuena, y suerte con tu búsqueda.

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