lunes, 18 de octubre de 2010
Harta
Estoy harta de todo esto. De promesas vanas, de "te quieros" falsos. Harta de que a la primera de cambios me dejen tirada sin que mis sentimientos importen lo más mínimo. Decidme, ¿acaso no merezco ser feliz? ¿No tengo derecho a vivir una historia de amor? ¿Por qué yo, y no cualquier otr@? ¿Por qué tengo que ser yo la que se pasa las noches sin pegar ojo, llorando hasta que mis ojos enrojecen y la garganta me escuece?. No es justo. No sé quién habré sido en otra vida, pero si creyera en esas cosas, diría que fui una persona horrible y que ahora el karma me está jodiendo para devolverme todo el mal que hizo mi yo pasado.
Puede que solo tenga 19 años, pero he sufrido mucho en mi corta vida. Perdí la cuenta de las veces que me han roto el corazón, aunque cada vez es peor, duele más. Y está envuelto con un celo tan fino que al más mínimo golpe se resquebraja, se hace pedazos y duele, como si me estuvieran clavando mil agujas en el pecho. Tan solo quiero encontrar el amor verdadero... Aunque hace mucho que dejé de creer en el amor. Es un espejismo, una ilusión. Es algo en lo que creen las quinceañeras que aún tienen espíritu de niñas y sueñan con príncipes, castillos y dragones. Como en los cuentos de hadas que leía de pequeña. Es curioso, nunca me identifiqué con el rol de princesa. Nunca me gustó. Supongo que era algo demasiado cursi para mí. A raíz de acontecimientos dolorososos que viví en mi infancia, tuve que endurecerme. Así fue como creé una coraza que me ha acompañado desde entonces. Quizá en esto influyó que mi signo zodiacal sea Cáncer, a pesar de que no creo en los horóscopos. Pero es cierto que, al igual que los cangrejos, tiendo a esconderme tras mi "caparazón" para evitar sufrir.
Ha habido gente que ha conseguido romper esa barrera lo suficiente como para que confiara en ellos. Y uno tras otro, irremediablemente, me han traicionado. Cada vez que confío en alguien y me dejo llevar, cada vez que mi corazón parece empezar a latir de nuevo, a reconstruir esos pedacitos que se clavan en mi pecho...¡ZAS! todo se viene abajo y vuelvo a estar en el punto de inicio. No sabéis lo tortuoso que resulta ir por la calle y ver la cantidad de parejas que hay, cómo se hacen arrumacos, comparten besos, pasean cogidos de la mano. Intento no fijarme en sus ojos. ¿Sabéis? Los ojos brillan de una forma especial cuando estás enamorado y eres correspondido. Yo también he estado enamorada, oh sí. Y creía que todo era perfecto...pero el que yo creía "mi príncipe azul" (sí, hasta había empezado a creer en esas cosas, fijaos si estaba enamorada...) resultó no ser más que la enésima rana que se cruzaba en mi vida.
Cada día que pasa mi alma se debilita más, mi corazón late cada vez más despacio. No me quedan fuerzas ni esperanzas. No creo en el amor ni la amistad, pues ambas son efímeras, modelables, traicioneras. Miro a mi alrededor y solo veo vacío, soledad. Perdí la ilusión hace mucho, la fe en el amor, la esperanza, las ganas de luchar. Todo eso me abandonó hace mucho. Sigo con vida, pero vacía por dentro. Y por las noches, en la soledad de mi habitación, con las lágrimas surcando mi rostro...solo deseo dormir y no despertar, dejar de sufrir, ir a un lugar donde poder ser feliz al fin y encontrar lo que me merezco.
¿Aparecerá alguien que me devuelva todo aquello en lo que dejé de creer? Lo dudo. En casod e aparecer, ¿conseguirá hacerme creer en todo eso de nuevo? Casi imposible.
Y sin más se despide este pequeño espíritu, este alma rota y vacía, este corazón hecho pedazos y sin fuerzas para recomponerse...
Nos vemos en la próxima entrada
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sabes que te entiendo muy bien, y por supuesto que nos merecemos ser felices, pero la vida y el mundo este es una jodida mierda aix ...
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